28.1.09

Problemas Sexuales (Capitulo Ellos)

El Panita que escribio esto fue Toston |



Pos si, los hombres también tienen problemas sexuales y asi como les hable de los problemas sexuales de ellas, me dispongo a hablarle de los de ellos.

Eyaculación precoz

“Es muy frecuente en la población masculina, el hombre que la padece es incapaz de alcanzar altas cotas de excitabilidad y no tiene un control voluntario sobre su reflejo eyaculatorio, por lo tanto el orgasmo se da sin que la persona pueda controlarlo cuando alcanza cierto nivel de excitabilidad.”

Algunas veces los hombres sienten tanta excitación que inclusive pueden llegar a eyacular en la puertica jejejje… o también apenas metió la puntica nada más.

En realidad, usted no puede decidir si se da o no se da, ya que es un acto reflejo, ni tampoco puede decidir cuanta esperma va salir, pero en todo caso lo que sí se puede hacer es controlarla y así lograr que se retrase.

A decir verdad lo que se recomienda es que se ejercite el músculo pubococcígeo (PC), del cual les hablare pronto, este músculo es el mismo que el hombre usa cuando quiere detener su orina, por tanto una ejercitación varias veces al día puede ayudar a retardar el momento de la eyaculación, además con estos ejercicios de contracción se puede evitar el esperma. En conclusión, apriete ese culo varias veces al día y vera mejoras.

Otra solución para lograr el retraso de la eyaculación es que la mujer tome un rol activo. Esto tiene que ver con ejercer una leve presión en el escroto.

Finalmente, también podría ser de ayuda que el hombre ponga su mente en blanco, respire hondamente y piense en el Calentamiento Global, los niños del Paramo, la Crisis Económica Mundial u otras cosas que le duerman el pipi.

Carencia de eyaculación, Eyaculación Retardada y Parcialmente Retardada
Verga que mala leche…


Carencia:

Este problema tiene que ver con la imposibilidad de llegar al orgasmo y puede tener tanto, peos físicas como mentales.

Con respecto a las causas físicas estas tienen que ver con operaciones al colon o a la próstata, así como también la hipertensión o la ingesta de medicamentos que puedan tener efectos secundarios sobre el pipi. Por tanto, estos problemas deben consultarse con la ayuda de un médico.

La carencia de eyaculación por peos psicológicos, tiene que ver con la imposibilidad de llegar a un orgasmo a pesar de que se tiene el pipi erecto y a veces, un verano intenso.

Puede darse que al tratar de complacer a tu pareja el clímax se ha retardado en exceso, entonces, se origina un bloqueo en la eyaculación. Por lo tanto, la panita que esta con uno puede ayudar a que esto no ocurra, mediante “la manuela”, la práctica del sexo oral (darle dos al muñeco), alternar con penetración anal (sin comiquitas) o vaginal en los momentos más oportunos.


Eyaculación Retardada

Es menos frecuente que las dos anteriores y quien la sufre no puede eyacular dentro de la vagina y no es por temor a meter la pata. La persona que la padece tiene una buena erección pero no es capaz de eyacular aunque lo desee y reciba una estimación suficiente para que se produzca el reflejo orgásmico. Algunos hombres que sufren esta disfunción sexual pueden eyacular con fantasías o una estimación adicional, otros nunca han podido tener un orgasmo durante el coito y tienen que recurrir a “manuela” en solitario.


Eyaculación Parcialmente Retardada

Esta problemática es poco frecuente en el hombre y es una variante de la eyaculación retardada, se caracteriza por no sentir las sensaciones orgásmicas cuando eyacula porque no se dan en su totalidad y el semen no sale proyectado sino como una especie de goteo.
En estos casos hay que hacer una terapia sexual específica, si hay algún conflicto resolverlo con terapia y descartar cualquier problemática que no sean peos psicológicos.


Erección irregular

Cuando a un hombre no se le para el pipi, es importante saber si es por condiciones físicas o por peos psicológicos. Así, si se consulta con un médico (urólogo) se podrá saber si es el primer caso sin embargo cuando ya se puede descartar que no es esto, entonces, podremos hablar de problemas emocionales o estrés.

Algunas veces también puede deberse a que de carajito las niñas lo rechazaban y no lo invitaban a jugare papá y mamá, o lo violó la madrastra, o se hizo pupú en el colegio y tiene baja autoestima por esa vaina, o la mamá pillo haciéndose “la manuela”. Este tipo de situación frustrante suelen hacer que se genere una ansiedad, lo que hace que la líbido se bloquee.

En tales casos, la pareja actual puede contribuir en una gran medida a que el hombre vuelva a lograr una erección pero sin que se fuerce a la penetración.

Así por ejemplo, unos masajitos pavitos por las zonas erógenas, un Mamerto López Caicedo, incluyendo el “nié”, entre otros, serian de gran ayuda para presenciar una buena erección.


Impotencia (en ocasiones o continuamente)

Cuando el hombre pierde el deseo sexual durante un periodo de tiempo debido a diferentes razones, esto hace que piense que tienes problemas de personalidad por lo que sus relaciones sexuales se ven definitivamente afectadas.

Esto puede tener un origen físico por lo que es aconsejable que visite a su médico, aunque también podría tener una causa psicológica que influya en la carencia de su líbido.
En sí, algunos hombres dejan de tener deseos debido a que alguna vez la cagó en una relación sexual pasada, se le salió un peo, se le salieron los mocos, piso a la chama, la quemo con un cigarro o se fue en 5 segundos, entonces, en la actual relación, sienten que deben protegerse para así no sufrir las mismas decepciones.


Problemas con la próstata

Hasta aproximadamente los 40 años es muy difícil que un hombre tenga algún problema con la próstata, a menos que haya padecido de alguna infección urinaria.

Lo cierto es que esto es un temita delicado para algunos hombres, ya que para verificar el estado de la próstata, la doctora o el doctor le introducen el dedo en el ano; aunque existen métodos alternativos, pero los médicos prefieren meter el dedito en el culito.

Lo mejor es prevenir y a los 40 ir al médico a que le metan el dedo en culo y lo chequeen.


Aversión Sexual

Esto es una vaina loca. Aquí el hombre puede estar enamoradísimo de su pareja y quererla más que a su madre, pero siente repugnancia hacia los contactos intimaos, esto debido casi en su totalidad a peos psicológicos. Terapia con esa vaina.


Dispaureunia

El dolor eyaculatorio y post eyaculatorio, suele ser por peos psicológico y se caracteriza por ser intenso, en el momento que eyacula o un poco después de haber eyaculado, la duración puede ser de minutos, horas, o incluso días y suele ser fuerte. Se produce por un espasmo de los músculos cremastericos (chanfles!!!) que oprimen a los testículos. Terapia con esa verga.


Problemas de Identidad Sexual

Esta es una de las más arrechas. Es cuando el hombre no sabe si es marico o no, es decir, si le gustan los hombres, las mujeres o ambos. Tiene mucho que ver con la auto aceptación y definición de la identidad sexual. Psicólogo con esa verga.


Fobias Sexuales

Son frecuentes y el individuo que las padece evita ciertas conductas o situaciones sexuales como la penetración, las secreciones vaginales, los contactos sexuales orales, besar etc. El paciente fóbico suele experimentar cuando se va a enfrentar a una relación sexual un componente de ansiedad elevado que no lo puede controlar y también suele tener ataques de pánico. Psicólogo con esa verga.


Falta de Deseo

Parece mentira pero está presente en un porcentaje alto de la población masculina. La falta de deseo puede ser por múltiples razones, casi la totalidad por peos psicológicos. Incluso el hombre puede llegar a tener erecciones y eyacular, pero de manera mecánica. Terapia con esa vaina.

Conclusión: al igual que el capitulo ellas, el factor común en los problemas sexuales de ellos es el psicológico. El mismo consejo para los hombres: déjese de mariqueras, deje de andar pensando en la tripartita, el chino de recadi, la partida secreta y esas webonadas y póngase a tirar que el mundo se va a acabar y su usted no coje a su mujer se la cojo yo, digo, se la coje otro.